Mensaje de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, durante la entrega de instrumentos del programa "Do, Re, Mi, Fa, Sol para la Ciudad de México"

JEFA DE GOBIERNO, CLARA BRUGADA MOLINA (CBM): Hola, amigas y amigos de esta Escuela “Gabino Barreda”. ¡Que viva la escuela! ¡Que viva la Escuela “Gabino Barreda”!

Miren, yo estoy muy contenta, realmente desde ayer estaba entusiasmada, queriendo que ya fuera el día de hoy, para poder venir y entregar este paquete de instrumentos musicales a la escuela.

Y quiero que demos un aplauso a mi inspiración: el hecho de que propongamos que todas las escuelas de la Ciudad de México tengan instrumentos musicales y maestros de música están allá, que se pongan de pie todos los integrantes de esta Escuela “Uganda”. Quiero decirles que la Uganda es una escuela que está en mi colonia, en San Miguel Teotongo, y es un honor saber que ahí existe una orquesta musical en esa escuela –ustedes la escucharon– y ¡ahí está mi inspiración!

¿Podemos o no podemos aquí en la Gabino Barreda? ¿Podemos o no podemos en toda la ciudad? ¡Claro que sí!, así que un aplauso aquí, ¡a mi inspiración!

Y por cierto, Ana Francis, les pido que la siguiente escuela de entregas sea la Uganda para mejorar sus instrumentos musicales, para mejorar, los quiero muchísimo; porque vean: generación tras generación —llevan décadas— con esta orquesta musical y de todo tipo, hoy escuchamos variadito, pero tienen música clásica y de todo.

Bueno, pues aquí estamos en un evento más, en estos primeros 100 días de gobierno, y qué mejor, el día de hoy arrancar con un proyecto musical para toda la ciudad: “Do, Re, Mi, Fa, Sol para la Ciudad de México”.

Y para que esto sea posible tuvimos que pedir permiso, tuvimos que pedirle a la Federación, que es quien tiene en su poder las escuelas de la Ciudad de México; por eso hoy está con nosotros nuestro amigo que acaban de escuchar, Luciano Concheiro, para permitirnos entrar a las escuelas a entregar estos instrumentos musicales y además echar a andar ya las clases y estas orquestas.

Quiero agradecer a Pepe Shabot, gracias –démosle un aplauso–, ellos son los que donaron los instrumentos musicales y son parte importante de esta Ciudad de México, con un compromiso social. Así que gracias, muchísimas gracias.

Y saludo a mis compañeras y compañeros. Y viene aquí la directora, démosle un fuerte aplauso a la directora de esta escuela, ¿por qué? Porque de ellos va a depender que esto funcione ¿o no?

DIRECTORA DE LA ESCUELA PRIMARIA “GABINO BARREDA”, VERÓNICA CORTÉS GÓMEZ (VCG): Claro, claro. Y, sobre todo, chicos, hay que demostrar con hechos que de verdad sí nos gusta la música y queremos algo importante para nuestra escuela y sobre todo sacar un coro, y en algún momento invitarla para que usted venga a vernos.

CBM: Bueno, pues yo sé que la directora y los maestros… démosles un aplauso a la directora y los maestros de esta escuela, un fuerte aplauso.

Y quiero hablar de que el día de hoy ustedes van a tener un conjunto de instrumentos musicales, bellísimos instrumentos musicales, con una belleza sonora: vamos a tener el oboe, la tuba –por allá andaba, allá la vemos, allá está–, el fagot –por aquí tenemos, aquí–. Son instrumentos que están presentes en distintos tipos de música, música popular, también música clásica o contemporánea, incluso música electrónica.

Y también hay violines, contrabajos, clarinetes, tarolas, ukeleles, trompetas, todos estos instrumentos listos para transformarse en inspiración, en conocimiento, en inspiración de todos ustedes. Así que tenemos un conjunto de instrumentos que son novedosos, difíciles de conseguir y además con un costo muy elevado.

Y miren, a mí me da tanto gusto empezar a construir, con nuestro aporte, una nueva generación de niñas, niños y jóvenes; una generación que aprenda música desde el primer año de edad; una generación que va a estar seis años aprendiendo música. Así que los que quieran pueden aprender a tocar piano durante un año completo, o durante otro año pueden aprender a tocar la tuba, o aquí están estos instrumentos como violines, lo que quieran.

Si ustedes quieren aprender un año –como decía– el teclado, un año piano, otro año –a ver qué otro instrumento les gusta– la guitarra; y miren, hay veces que ni siquiera conocemos los instrumentos musicales que existen, cuando aprendan a tocar fagot, cuando aprendan a tocar algunos otros instrumentos que no conocen, va a cambiar la vida.

Cuando las niñas y los niños se entusiasman y aprenden un arte, en este caso música, cambia la vida y eso es lo queremos. Queremos cambiar la vida de la población infantil y juvenil de la Ciudad de México. Por eso, el programa del Gobierno de la Ciudad es dotar de instrumentos musicales, y maestros y maestras de música, a todas las escuelas públicas de la Ciudad de México.

Esto es un hecho muy importante porque son muchas, entonces hoy que platicaba con los compañeros les decía: “pues mínimo el próximo año tienen que ser, mínimo, 500 escuelas”, a ver cómo le vamos a hacer, mínimo 500 escuelas.

Y yo convoco a todas las escuelas primarias y secundarias públicas que quieran tener los instrumentos musicales, que se anoten, porque vamos a abrir una convocatoria para las escuelas que quieran que les llevemos los instrumentos musicales, más los maestros o maestras de música, ¿de acuerdo?

Pero ustedes son la primera escuela —ustedes son la primera escuela— y yo espero regresar en el mes de marzo, en el mes de marzo voy a regresar, y yo quiero escuchar a una orquesta tocando ya sus instrumentos musicales, en el mes de marzo.

Miren, los maestros de música que van a tener, van a estar acá todos los días, todos los días, no una o dos veces a la semana, todos los días y a todos los horarios para que se pueda por grupo estar aprendiendo; ya se organizará muy bien esto, pero eso es lo que queremos.

Aprender música, cultura, cualquier otra arte, deporte, ciencias, es lo que quiere el Gobierno de la Ciudad para transformar las escuelas. Pronto, muchas escuelas las vamos a abrir, con el consentimiento de la Autoridad Federal, para que los fines de semana también vengan los niños a aprender ciencias, deporte, cultura; y, además, como he dicho, las escuelas como el centro más importante de la comunidad.

Lo primero que vi al entrar es lo que le hacía falta a la escuela, entonces no podemos tener instrumentos musicales y abandonar la escuela nada más. Así que les quiero comentar de un programa que es la renovación de todas las escuelas de la Ciudad de México, son muchas, pero vamos a entrar cada año alrededor de 500 o 700 escuelas, en donde vamos a componer todo lo que le haga falta, pintar, no solo las fachadas, sino al interior.

Hace rato me venían a pedir una techumbre, bueno, si lo autoriza la Secretaría de Educación Pública, en todas las escuelas vamos a instalar techumbres y eso es muy importante; y yo sé que eso es lo que los padres de familia y los niños quieren, solo se necesita una autorización, de acuerdo a lineamientos que tiene la propia Secretaría de Educación Pública, y si se autoriza, ponemos la techumbre; arreglamos, por supuesto, los baños; dotamos de todo lo que sea necesario.

Incluso, como dice la Constitución, garantizar que en las escuelas podamos tener el consumo de agua potable y eso no puede ser de las llaves, así que vamos a echar andar estas plantas potabilizadoras de agua en cada escuela.

Para que los niños y niñas aprendan a beber agua, porque no estamos acostumbramos, es más, si no tiene dulce no la consumimos ¿o no? Si no les damos a la hora del recreo una agüita endulzada y que se compra –que no digo las marcas– pues no estamos contentos, así que si les damos un vaso de agua a veces muy pocos la toman. Entonces, ¿qué es lo que queremos? Queremos que todos los niños y las niñas empiecen a tomarle gusto a el agua, el agua para poder acostumbrarnos y a vivir mejor y con salud.

Así que vamos a intervenir mucho en las escuelas, vamos a transformar todas las escuelas de esta Ciudad de México y qué mejor que con cultura, con arte, con deporte, con ciencias, con la renovación física de la escuela, que si se necesita el mobiliario, también. Y hasta estamos viendo que cada escuela tenga actualizado su salón de cómputo –¿no sé cómo esté por acá, maestra? Mal, ya me lo imaginaba, así que vamos a actualizar para que tengan sus computadoras, su salón de cómputo y puedan nuestras niñas y niños tener lo mejor.

Así que vamos a inscribir a la Gabino Barreda dentro de las primeras escuelas para —renovar— para renovar para todos, también la Uganda, sí, a estas dos escuelas para todo lo que les haga falta.

Bueno, yo quiero agradecerles. Les quiero comentar que con la música se puede transformar la vida y nosotros le apostamos a eso. Pensamos que, si las niñas, niños y jóvenes aprenden a tocar instrumentos musicales, no tocarán una pistola; y queremos disminuir la nota roja que aparece todos los días en la ciudad y convertirla en la nota musical que ustedes van a tocar en las escuelas, ese es nuestro gran objetivo.

Y a mí me da mucho gusto el día de hoy hacer esta entrega y vamos construyendo todo lo que se necesite para que todas las escuelas que quieran, en esta ciudad, tengan instrumentos musicales.

Para el próximo evento, Ana Francis, invita al mejor flautista del mundo, ¿quién es? Horacio Franco. Él aprendió a tocar flauta en la secundaria y gracias a que fue el instrumento musical que tuvo a la mano se convirtió en el mejor flautista del mundo. Así que lo vamos a invitar para la siguiente escuela.

Y, mientras tanto, dejamos nuestro corazón puesto en la Gabino Barreda, dejamos nuestro corazón puesto en la Escuela “Uganda”, los queremos mucho.

Y yo estoy segura, miren, llevamos creo que mes y medio de gobierno, no llevo la cuenta, 37 días llevamos de gobierno. O sea, ustedes tienen seis años para transformarse en músicos, tienen seis años para que aquí se generen los talentos musicales del país; si solo unos cuantos tienen la posibilidad de pagar escuelas de música privada, con esto estamos democratizando la música y haciendo que cualquier niña y niño de esta ciudad pueda convertirse en el próximo talento musical de la ciudad, del país y del mundo.

Así que yo les pregunto a ustedes, niñas y niños: ¿Están dispuestos a aprender a tocar los instrumentos musicales? ¡No se oye! ¡Más fuerte! ¡Muchas veces!

Bueno, muchas gracias a todas y todos.