Transcripción de las palabras del Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama; durante la Presentación del Plan Integral de Manejo del Centro Histórico 2023-2028

Publicado el 23 Octubre 2023

JEFE DE GOBIERNO, MARTÍ BATRES GUADARRAMA (MBG): Muchas gracias, amigas, amigos, compañeros del presídium y del público que nos acompaña; ya presentadas y presentados todas y todos. Ya tenía ganas de que presentáramos este plan, de hecho, luego nos van ganando los acontecimientos, pero ya teníamos la idea de presentarlo porque es muy importante.

El Plan Integral de Manejo del Centro Histórico 2023-2028 es nuestro eje rector para cuidar y lograr un mayor mejoramiento progresivo integral del Centro Histórico. Se trata, a través de este Plan, de buscar la conservación, la rehabilitación, el aprovechamiento, el disfrute y la potenciación de nuestro Centro Histórico.

El Centro es muy importante; el Centro es México, espero que no me malentienda, pero del Centro se deriva el nombre de nuestro país, porque una región muy pequeñita era México, Mexhico, y el nombre se trasladó a una región más grande y al país conjunto.

Cuando fui por primera vez a Guadalajara, hace muchísimos años con unos familiares, me acuerdo de que la gente decía “voy a México” o “vas a ir a México” y se referían a la ciudad, a mí se me hizo muy raro porque México es nuestro país, pero decían “México”. Pero todavía me llamó más la atención cuando estando en Xochimilco escuchaba a la gente decir “sí, va a México, trabaja en México”, o sea, al Centro, eso es México.

Pero de mis abuelos escuché, viviendo a la altura del Metro Villa de Cortés, o sea, más o menos por la colonia Nativitas, decían que mandaban a mi papá y a sus hermanos a México a estudiar, tomaban el tren para venir a México. El Centro tiene esa implicación, es una concentración de historias, de cultura, de valores políticos, muy densa, muy fuerte.

Y ahora se ha hecho este plan integral con la participación de instituciones culturales, de la academia, de vecinos, de visitantes, que son muy importantes porque la población que no vive aquí y viene al Centro todos los días es enorme, y de los sectores privado y público también.

El proceso de elaboración de este plan ha sido interesante y amplio, hace varios meses nos reunimos cuando era un planteamiento, era un proyecto, y a lo largo de estos meses se fue consolidando hasta presentar esta propuesta.

Es muy importante porque lo que pasa en el Centro es fundamental para la vida del país. El Centro, además de ser un espacio histórico, como mencioné, y de alta concentración, de densidad político-histórica, es el más importante espacio cívico, cultural, político del país y sigue teniendo su propia vida.

En el Centro hay una intensa vida económica, pero el Centro tiene su propia vida barrial, aquí tenemos barrios históricos como la Lagunilla, Tepito, Santa María La Redonda, la Merced, el Barrio Chino, para mencionar algunos de ellos, Mixcalco, y seguramente me faltará alguno; son barrios varios de ellos, si no es que todos, prehispánicos, y que se fueron uniendo en la gran amalgama del Centro Histórico.

Pero es, además, el lugar a donde llega México. Esa frase que aquí se elaboró desde hace ya tiempo de que la Ciudad de México es la ciudad que lo tiene todo, esa se realiza mucho aquí, sino solo aquí, mucho aquí; pero si buscas comprar algo que es difícil de encontrar, lo más probable es que lo encuentres en el Centro Histórico y aquí lo puedas adquirir y comprar.

Si quieres ir a un buen restaurante para celebrar algo importante, una boda, unos quince años, un cumpleaños, etcétera, vienes aquí al Centro Histórico; es más, aquí está mucho de lo mejor y las tradiciones.

Y hablando de anécdotas, y tradiciones, yo me acuerdo de que mis abuelitos venían a comprar el pan aquí, creo que era el Pan Segura, no sé si siga existiendo, pero, aunque no vivían en el centro venían acá a comprarlo, por eso digo, aquí se realiza la frase de “este es el lugar que tiene todo”.

Pero es el espacio también de una muy vigorosa arquitectura colonial que tenemos que cuidar y es el espacio donde uno puede contrastar esa arquitectura colonial con los vestigios del Templo Mayor, o sea, arquitectura prehispánica, del gran centro político prehispánico, y con arquitectura moderna, aquí está la Torre Latinoamericana y muchos otros ejemplos.

Aquí, el centro ha sido también un espacio político muy importante, las grandes movilizaciones sociales que han cambiado a México aquí han llegado, las grandes movilizaciones del 68, del 86, 87, del 88 y también de la resistencia civil pacífica del 2004-2006, nada más para poner unos ejemplos de grandes movilizaciones políticas que han transformado a México y que necesariamente tuvieron que pasar por aquí.

Es, además, el Centro el espacio de nuestros más grandes espectáculos y acontecimientos culturales, bueno, acabamos de tener hace unos meses a los Fabulosos Cadillacs, que reunieron, convocaron a 300 mil personas, aquí ocurrió, en el Zócalo de la Ciudad de México. Es el gran espacio de acceso cultural, tenemos la Noche de Primavera y muchas otras experiencias, donde la gente sin pagar puede acceder al beneficio de la cultura y del arte.

Y también es el punto, también, digamos, en otros aspectos, centro religioso con la Catedral, que es muy importante, es la Catedral más importante de América Latina, que todo ello representa lo que es nuestro Centro Histórico y un espacio de ensayo del nuevo urbanismo.

Aquí, cuando se hizo peatonal la calle de Madero, pensamos inmediatamente en los grandes beneficios de conquista del espacio público, porque una calle que era superficie rodante para automóviles, se convirtió en un espacio para caminar, donde caminan cientos de miles de personas; pero también benefició la economía porque no es lo mismo ir en coche, ver un lugar que te interesa y no poderte detener porque tienes que ir a otros espacios a estacionarte, en fin, que ir caminando y poder ingresar a ese establecimiento o a ese restaurante o a ese lugar. Bueno, ese es nuestro centro y por eso es tan importante.

Ahora, recientemente, todavía se ha fortalecido su aspecto central-nacional porque el Presidente de la República se estableció en Palacio Nacional, Los Pinos dejaron de ser la residencia oficial, ahora son un gran espacio de cultura, por eso ya se puede hacer la Rueda de la Fortuna en Chapultepec y eso también ha revitalizado esta centralidad política de nuestro Centro Histórico.

Ahora, nosotros estamos haciendo diversas obras como gobierno, como se ha informado aquí por el secretario de Obras; estamos en la revitalización de Garibaldi, la plaza se renovó; luego se cambió esta zona que tenía observaciones críticas, la de los magueyes, se sustituyó por un kiosco, de acuerdo a las propuestas de la gente que visita este lugar. Ya inauguramos, rescatamos dos lugares que eran espacios oscuros, por decir lo menos, Honduras 1 y Honduras 3, ahora son centros culturales, artesanales, indígenas, y eso nos va ayudando a regenerar el espacio, entonces Garibaldi está teniendo una gran atención.

Y luego también, ya abrimos otros debates, abrimos el debate del Zócalo como espacio libre de humo y, la verdad, luego les platico más detalles, pero avanzamos bastante. Y ahora, abrimos otro debate que es la peatonalización del Zócalo, es decir, para que sea una gran plaza cívica, donde la gente pueda venir, caminar, y bueno, estamos abiertos a recibir las opiniones de todo el mundo, está abierta una página para ello, para ese importante debate.

En todo caso, por todo lo dicho aquí, por lo que se ha hecho, se ha invertido, lo que se hace de acción social también en todos los terrenos, de rescate, de regeneración vecinal, cívica; por sus implicaciones políticas, culturales, históricas, bueno, por todo ello, tenemos la obligación de cuidar el Centro Histórico, tenemos la obligación de cuidar el Centro Histórico para poder disfrutarlo en todas sus dimensiones.

El plan que se presenta el día de hoy, el Plan Integral de Manejo del Centro Histórico 2023-2028 es un planteamiento para cuidar y disfrutar nuestro Centro Histórico.

Felicitaciones, muchas gracias.

SECRETARIO DE OBRAS Y SERVICIOS, JESÚS ANTONIO ESTEVA MEDINA (JAEM): Gracias, buenas tardes a todas y todos, Jefe de Gobierno, compañeras y compañeros. A continuación, informo sobre las acciones llevadas a cabo que son esta materialización de las convicciones, son el pensamiento llevado a una obra. Dice Sándor Márai que el hombre hace suyo un lugar no solo con el pico y con la pala, sino con lo que piensa y picar al palear, y esto que vamos a ver es el reflejo de ese pensamiento al picar y palear.

En una primera etapa intervenimos la zona del Barrio de Zoquiapan, Santa María la Redonda Sur, Avenida Hidalgo, Eje Central y mantenimiento de fuentes urbanas, que estaban todas apagadas en el Centro Histórico cuando llegamos.

En una segunda etapa, aquí están viendo, -bueno, ya la tercera, la segunda etapa- fueron zonas que, insisto, no se habían intervenido, había una separación clara, inclusive en los acabados, entre el perímetro A y el perímetro B; y en esta visión de igualdad, de recuperación del espacio público como sitio donde se da el tejido social, que ese es el sentido, es el pensamiento que tenemos al picar y palear, es que vamos interviniendo cada una de estas etapas, vamos eliminando esas fronteras, dando los mismos acabados que teníamos de recinto en el perímetro A y continuando hacia el perímetro B.

Entonces, estamos viendo una intervención de más de 300 mil metros cuadrados de superficie, nada más en lo que son los diferentes perímetros -bueno, aquí ya estaba la primera etapa- Avenida Hidalgo, donde ganamos en peatonalización, Eje Central también interviniendo y ganando y haciéndolo peatonal.

Segunda etapa. Santa María La Redonda Norte, ya habíamos intervenido sur; Eje Central; la calle de Francisco Zarco; Balderas también, haciendo peatonal, recuperando espacios. Tercera etapa, barrio de San Hipólito, ya entrando a la Guerrero, República de Chile, Tacuba, 5 de Mayo, San Ildefonso. Y diferentes plazas: José Martí, Solidaridad, Empedradillo, así como Paseo de la Reforma, llevándolo hasta el Eje 1 Norte, continuando con el mismo lenguaje arquitectónico que traemos en Paseo de la Reforma.

Cuarta etapa, ya el barrio de la Lagunilla, continuando también Reforma hasta el Eje 1 Norte. Y la quinta etapa, en la que estamos, que es Plaza Garibaldi. Siempre escuchando a la comunidad, ejemplo de eso es lo que estamos viviendo ahorita en Plaza Garibaldi, este kiosco que pedían los mariachis y que le da dignidad y que le da un uso, que le permite apropiarse a la comunidad del espacio.

Entre las acciones, el incremento del nivel de iluminación con 2 mil 059 luminarias LED y que se percibe el antes y el después; la Alameda estaba apagada cuando la recibimos, ahora se mantiene, hicimos cambio de cableado, cambio de subestaciones.

Aquí también la ampliación, esto es muy importante, este es nuestro pensamiento cuando picamos, al picar y al palear, como dicen, es el área peatonal y ciclista, cómo incrementamos en Avenida Hidalgo, en Avenida Balderas, en todas las intervenciones que llegábamos a hacer en el Centro Histórico, entendemos el uso y entendemos la importancia y priorizamos al peatón y a los modos de interconexión de movilidad sustentable, esta Movilidad Integrada.

Entonces, ahora tenemos 5 kilómetros más de ciclovías en diferentes puntos, incluyendo un tramo ya dentro el propio Zócalo, donde hacemos este urbanismo táctico del Zócalo para caminar, el Zócalo para los peatones y que, en este momento ya, con el Jefe de Gobierno, está en consulta la peatonalización de la totalidad del perímetro.

Incrementamos las áreas verdes también, como criterio de sustentabilidad, y aquí algo muy importante, la interconexión hacia el Centro Histórico. No nada más era el perímetro A y B, sino cómo llegamos con los trazos prehispánicos, que es Avenida Chapultepec por un lado y la calle más antigua de América, que es Tacuba. Y que después, otra vez nuestro pensamiento hace que transformemos el espacio de Puente de Alvarado, en México-Tenochtitlan y le damos la dignidad y le damos el nombre que refiere a la resistencia de los pueblos originarios.

Y bueno, todo esto con el incremento de áreas verdes, con innovación en cuanto a sistemas de infiltración, jardineras infiltrantes que, como pueden observar, se ha mantenido toda esta vegetación. Sembramos cerca de 900 árboles, más cientos de miles de arbustos.

En cuanto a superficie de rodamiento, atendimos 120 mil metros cuadrados de superficie, en algunos casos cambiando a concreto hidráulico y en otros casos repavimentando.

Y la recuperación de plazas. Aquí vemos en especial Garibaldi, que ya está en proceso, que ya falta pocos días para abrirla, donde, como decía, escuchamos a las… bueno, esto es el Empedradillo donde ganamos en espacio peatonal, pero en el caso de Garibaldi escuchamos a la comunidad, escuchamos a quienes son los usuarios para que la obra al final tenga esa apropiación y tiene el sentido de a quiénes estamos sirviendo y, bueno, todas estas plazas que intervinimos.

Y a continuación un pequeño video de todas las acciones llevadas a cabo, a la fecha, con esta visión.

[VIDEO]

Gracias. Me faltó comentar, vieron la parte de arriba, vieron la superficie, pero lo que hay hacia abajo, la intervención que se hizo del Sistema de Aguas, de Comisión Federal de Electricidad, del ducto maestro por parte de la ADIP, o sea, todo lo que muchos de los que están aquí presentes sufrieron durante este proceso, es muy relevante, el soterramiento de todas esas instalaciones.

En total fue una inversión de más de mil 200 millones de pesos a la fecha y continuaremos ahora para el cierre de la administración.

Gracias.

COORDINADOR GENERAL DE LA AUTORIDAD DEL CENTRO HISTÓRICO DE LA CIUDAD DE MÉXICO, JOSÉ MANUEL OROPEZA MORALES (JMOM): En primer lugar, agradecer a todas y a todos, su presencia, su asistencia.

En este espacio pequeño está representado la diversidad y pluralidad del Centro Histórico de la ciudad: vecinos, vecinas, presentantes de mercados públicos, empresarios, empresarias, los museos más emblemáticos del Centro Histórico, inmuebles de la Universidad Nacional, representantes de gremios como el de mariachis, de organilleros, representantes de nuestras comunidades indígenas, comerciantes en vía pública, representantes de plazas, COPACOS, y todo el amplio ejército de servidores y servidoras públicas del Gobierno de la Ciudad de México que diario trabajamos en la gestión del Centro Histórico de la Ciudad.

Como decía la maestra Loredana, nos da mucho gusto porque esta es la gestación de este tercer Plan de Manejo del Centro Histórico de la Ciudad de México, que viene a retomar y a fortalecer lo que se ha hecho en periodos anteriores y cumpliendo con la obligación que tenemos con la UNESCO y, sobre todo, con las y los mexicanos, porque el Centro Histórico es Patrimonio Cultural de la Humanidad y tenemos la obligación de cuidarlo, de preservarlo, de difundirlo y potenciarlo porque no solamente hay aquí una gran riqueza histórica-cultural, sino este es el corazón económico también de la Ciudad de México y del país.

En estos 10 kilómetros cuadrados, que están protegidos por la UNESCO, se concentra la mayor actividad económica, cultural y política, no solamente de la Ciudad de México, sino de toda la nación y por eso nos da mucho gusto que hoy podamos presentar este Tercer Plan de Manejo del Centro Histórico que va para el periodo 2023-2028.

Y agradecer el apoyo que hemos tenido permanentemente del Jefe de Gobierno, del maestro Martí Batres, y todo el impulso que tuvimos también en su momento, de la doctora Claudia Sheinbaum, para trabajar de manera muy intensa en toda la estrategia de manejo y recuperación del Centro Histórico de la Ciudad.

La elaboración de este plan implicó muchas etapas de trabajo, tanto de un prediagnóstico, los talleres de participación que tuvimos con la comunidad en diversos puntos del Centro Histórico; una tercera etapa donde ya nos sentamos con los investigadores para revisar el mismo; y la propia cuarta etapa, que estamos cerrándola el día de hoy con la revisión y la presentación. Y, a partir de la revisión de este plan, vamos a entrar a la estrategia de seguimiento, evaluación de los objetivos, de las metas que plantea el Plan de Manejo.

El plan está estructurado en seis ejes que les voy a comentar muy rápido, el primero es el eje de la habitabilidad, así lo hemos definido, donde se establecen lineamientos para el rescate del espacio público del Centro Histórico.

Como acaba de mencionar el secretario de Obras, ha sido muy importante la inversión, el trabajo del Gobierno de la Ciudad en el rescate del espacio público aquí en el Centro Histórico de la Ciudad. Contamos con 96 espacios públicos muy importantes, 41 plazas y 51 jardines; 56 de ellos catalogados por el INAH, el INBAL o la SEDUVI y que requieren de un trabajo de intervención muy importante.

Un tema centralísimo del eje de habitabilidad es todo lo que tiene que ver con la vivienda. Trabajar en todo el proceso de recuperación de la vivienda de alto riesgo que sigue existiendo en el Centro Histórico, la vivienda para la población indígena, los esquemas de participación de vivienda con el sector privado; a través de la vivienda incluyente, los sistemas de (inaudible) por cooperación y todo el trabajo que se viene haciendo también de la mano con la Procuraduría Social, en materia de atención a las unidades habitacionales del Centro Histórico.

En este mismo eje de habitabilidad tenemos todo lo que tiene que ver con la sustentabilidad del Centro Histórico, que tiene que ver con los temas de la iluminación, de trabajar en el arbolado, de reducir la isla de calor que se presenta en diversas avenidas del Centro Histórico, particularmente la calle de Madero, que requiere de una estrategia integral en la materia.

Y todo lo que tiene que ver con el trabajo de seguridad, en torno a esto tenemos una mesa permanente de Gobierno y Seguridad, donde participan todas las áreas que tienen que ver con estos temas y los esquemas de colaboración y participación con los vecinos.

El segundo eje es la economía y el turismo porque, insisto, este es el corazón económico de la ciudad y tenemos alrededor de 40 mil unidades económicas establecidas en el Centro Histórico de la Ciudad, 29 mil dedicadas al comercio que dan empleo a casi 200 mil personas; pero también en el Centro Histórico tenemos 29 mercados públicos, 51 plazas del comercio popular, un número importante también de vecinos, vecinas que se dedican al comercio en la vía pública y que forman parte de la realidad del Centro Histórico, que hay que trabajar, que hay regular y que hay que atender.

Y todo el tema del turismo que, sin lugar a dudas, para el Centro Histórico es fundamental y en torno al cual están planteados una serie de programas, proyectos, en materia de corredores turísticos, del fortalecimiento de la señalética, la elaboración de una aplicación turística para el Centro Histórico, etcétera; todos ellos proyectos que, además, se vienen trabajando de la mano con Secretaría de Turismo, con Secretaría de Cultura y con todas las áreas del Gobierno de la Ciudad.

El tercer eje tiene que ver con el patrimonio histórico y cultural, donde hay también innovaciones importantes. Se incorpora el tema del Patrimonio Científico y Tecnológico como parte del patrimonio que hay que generar un inventario, que hay que preservar y que hay que proteger. Hay una lista de 25 inmuebles que pueden ser catalogados como Patrimonio Científico-Tecnológico y nueve listas de catálogos, de bibliotecas, de manuscritos, etcétera, que tiene ya muy bien ubicados la Universidad Nacional, el PUEC, y que es parte de lo que vamos a trabajar.

Y toda la estrategia que tiene que ver con la preservación, protección del patrimonio tanto material, como inmaterial, tenemos 3 mil 497 inmuebles catalogados en el Centro Histórico de la ciudad: 2 mil 293 en el perímetro A y mil 204 en el perímetro B, y protegerlos implica un trabajo muy arduo de coordinación con todas las áreas del Gobierno de la Ciudad, con las áreas que tiene que ver con la Seguridad Pública, con el INVEA, con la PAOT y con todas las dependencias que tenemos que trabajar de manera coordinada para la protección, preservación y mantenimiento del patrimonio material.

Y no hablemos del patrimonio inmaterial, tenemos en curso cumplir con los organilleros en su Declaración como Patrimonio Cultural Inmaterial del Centro Histórico y con diversos sectores que forman parte de la identidad y la cultura del centro.

El cuarto eje es la movilidad y la funcionalidad urbana. Nada más les doy tres datos: aquí se generan 464 mil viajes diarios de atracción al Centro Histórico y de aquí hacia afuera son 459 mil viajes diarios que se generan del Centro Histórico hacia otros espacios de la ciudad o el área conurbada; y tenemos 71 mil viajes internos, esto de acuerdo a las encuestas de movilidad que tiene la Secretaría en la materia.

Entonces, la movilidad del Centro Histórico es todo un reto, es compleja y tenemos que trabajar, hay una serie de propuestas que están aquí planteadas en el plan que habrá que aterrizar y concretar con las diversas áreas.

También todo el tema de mantenimiento de la infraestructura hidráulica, que no es menor, es importantísimo el trabajo que hace el Sistema de Aguas en la Ciudad de México, aquí en el Centro Histórico para atender toda la red de drenaje de agua potable, y atender la demanda y exigencia ciudadana que todos los días tenemos temas al respecto, y trabajar en todo el tema de la infraestructura energética de la ciudad.

El otro eje es la ciudadanía y la cultura cívica. En este tema estamos trabajando muy de la mano también con el Fideicomiso del Centro Histórico que tiene su escuela de capacitación para ciudadanos, con el área de Cultura Cívica de la Ciudad de México para implementar todas las estrategias de conciliación vecinal, todo lo que estamos trabajando también con PROSOC en materia condominal.

Y hemos impulsado algunas redes vecinales que nos parecen muy importantes; la red de chats o VIPPSC que tenemos en el Centro Histórico, que es un mecanismo que nos permite atender la gestión cotidiana de temas de seguridad, de protección civil, de servicios urbanos, que funciona los siete días de la semana, las 24 horas para la atención de todos los temas que nos plantean los ciudadanos.

Estamos también construyendo una iniciativa de un Centro Histórico Resiliente en materia de Protección Civil; y una Red de Mujeres Constructoras de Paz para atender el tema de la violencia de género en el Centro Histórico.

Y el sexto y último eje, es revisar y fortalecer todo el marco legal e institucional del Gobierno de la Ciudad, de la Autoridad del Centro Histórico, a efecto de que este plan se pueda concretar, donde se requiere de mucho trabajo de coordinación entre las diversas dependencias del Gobierno de la Ciudad, de crear un mecanismo de evaluación y de seguimiento del mismo, y de reactivar los esquemas formales de participación social y comunitaria en el Centro Histórico, como este Consejo Consultivo que existió en otros momentos o espacios que nos permitan un esquema de evaluación y de seguimiento por parte de toda la comunidad.

Esto es, a grandes rasgos, lo que establece este Plan de Manejo; y una vez hoy presentando y publicado en esta semana en la Gaceta del Gobierno de la Ciudad, vamos a trabajar en toda la estrategia de implementación del mismo, coordinados con las áreas del Gobierno de la Ciudad, con el Gobierno federal y las alcaldías que tienen competencia en el Centro Histórico de la Ciudad.

Les agradezco a todas y todos, su presencia, su participación y hoy tenemos Plan Integral para los próximos cinco años.

TITULAR DEL FIDEICOMISO CENTRO HISTÓRICO DE LA CIUDAD DE MÉXICO, LOREDANA MONTES LOPEZ (LML): Muchas gracias a todos. Un día muy gozoso para mí poder estar aquí, porque veo muchísimas caras conocidas; porque en este presídium, además, de gala, saludo más que a los funcionarios públicos que sí, por supuesto, saludo también a muchos amigos y a mucha gente que ha estado colaborando en esta labor tan extraordinaria que tiene que ver con la preservación del Centro Histórico.

Y bueno, Manuel Oropeza, muchas felicidades. Esto es un parto, estamos en la sala de partos, me encanta que podamos decirlo así y que este producto que hoy se presenta, este plan que es una continuación con el plan de manejo anterior, obviamente con todas sus actualizaciones, con todas las formas pertinentes que hoy plasma este nuevo Plan de Manejo del Centro Histórico, creo que es un gran momento, la verdad, es un documento muy, muy importante.

El Jefe de Gobierno, gracias, Martí, por la invitación, por los apoyos.

Bueno a toda la gente. Yo la verdad estoy feliz y quiero que se me note y ahora sí ya va el discurso, el de acá.

La antigua Tenochtitlan, en su esplendor y magnificencia, dejó material suficiente para que una vez derruida volviese a crecer de entre su suelo, como si de una planta se tratase, otra ciudad magnífica, otro lugar de riqueza y suntuosidad que, al inscribirse como un palimpsesto en el paisaje del Lago de Texcoco, se mezclara como siempre en piedra, sangre, baile e instituciones para dar origen a la increíble hibridación cultural que fue conformando la Ciudad de México.

El Centro Histórico al ser un lugar fundacional, concentra un patrimonio cultural cuyo valor no puede medirse, es la cuna de lo que somos, representa nuestro origen, es el elemento ontológico de nuestro ser mexicano.

Las acciones que se han llevado a cabo desde hace muchas décadas para que el perímetro que hoy llamamos Centro Histórico de la Ciudad de México pueda ser, han sido variopintas. Las iniciativas y concreciones para su preservación han partido desde distintos puntos cardinales, es decir, han sido objeto de iniciativas desde lo privado, desde lo social, desde lo académico, desde lo gubernamental.

La historia más reciente, como todos sabemos, consiguió una plataforma desde lo jurídico, al ser reconocida la zona por UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad; ello trajo consigo compromisos ineludibles para su atención, aunque, como bien sabemos, las responsabilidades se asumen o no, bien pudimos haberlas no asumido ¿verdad?

Sin embargo, lo más interesante es que nosotros –todos, todos– hemos asumido la responsabilidad de preservar nuestro pasado, cuidando de forma muy específica los 10.5 kilómetros cuadrados de espacio que se proyecta en tiempo y de tiempo se proyecta en ser, en ser de mexicanos.

Este cuidado, porque tiene causa, es que adquiere forma, estructura, proyecto, idea y concreción en un plan que nos permita una convivencia atemporal en la que los vivos logremos hablar con los muertos; en el que los negocios y el trolebús no entren en contradicción con la Coatlicue o con el Tzompantli o con La Iglesia de Loreto o con los Jardines del Claustro de Sor Juana, ni con la huella de historia reciente del barrio universitario.

Es un plan en el que se ha de tejer tan fino, que permita mezclar distintos materiales para convertirlos en uno solo. En el que se teje la algarabía del barrio bravo de Tepito, con la potente proyección de México al mundo desde el suntuoso Palacio de Bellas Artes. Lo mismo esquivando el golpe del diablero en La Merced, que permitiendo que nos quedemos en una esquina de Madero escuchando la potente voz de algún cantante en la calle, en lo que pasamos a la enésima tienda para ver cuál es el vestido que por fin nos convence o los tenis que finalmente le gustaron a nuestro hijito “El Benjamín”.

Que igual nos dé acceso a echarnos un danzón en una tarde de baile en la Alameda Central, que a disfrutar de la estética de una exposición de Kandinsky en alguno de las decenas de museos que existen en el perímetro, pero para eso hay que llegar en taxi, en Metro, en Trole, en camión, en auto propio o “a pata”, pero hay que llegar.

Y hay que quedarse durante el día y hay que comer en un restaurante gourmet, en los clásicos Café Centenario de 5 de Mayo, el restaurante de comida china allá por Victoria y Artículo 123, donde la abuelita compró la lámpara de la sala o en la cocina económica o la garnacha de la esquina.

Un mundo abigarrado, intenso en su dinámica, inmenso en su cultura, inenarrable en su ser colectivo, requiere una gestión, requiere de ese plan que permita transitarlo, que le dé sentido, que le construya puentes a sus habitantes y a sus visitantes, es esa la importancia de un Plan de Manejo para el Centro Histórico.

En uno de los centros históricos más grandes del mundo, la tarea se antoja a veces irrealizable, pero los retos son parte de lo que mueve las voluntades y esta vez no hay excepción. El nuevo paradigma de los centros históricos contempla la participación de la ciudadanía en sus procesos de transformación y desarrollo.

No es posible conservar un sitio patrimonial, si quienes lo habitan y visitan no participan activamente en la toma de decisiones, desarrollan un sentido de pertenencia y un sentimiento de orgullo por su cultura de la que devienen y que les ha sido heredada.

En todo este contexto, el Gobierno de la Ciudad de México consciente de lo anterior, ha desarrollado a lo largo de la presente administración, estrategias y políticas que se han venido haciendo acciones en una serie de trabajos de recuperación del espacio público, así como la rehabilitación de numerosos inmuebles, muchos de ellos afectos al patrimonio histórico.

Asimismo, ha llevado programas culturales y desarrollo social, pues estamos conscientes de que estas acciones tienen un efecto definitivo sobre el bienestar y la vida comunitaria de la población.

En este sentido, el Fideicomiso Centro Histórico de la Ciudad de México, como un ente que está facultado para ejecutar obra pública, como un ente especializado en obra de restauración, preservación y recuperación de inmuebles patrimoniales con valor histórico, conocedor experto de la arquitectura que recupera las antiguas fábricas y diseños de los monumentos y edificios históricos, así como de las implicaciones que ello tiene en el paisaje urbano, histórico y patrimonial.

Como una entidad paraestatal del Gobierno de la Ciudad de México que difunde el valor patrimonial de sitio, como representante del Gobierno de la Ciudad de México frente a la Asociación Mexicana de Ciudades Patrimonio del Mundo y frente a la Organización de Ciudades Patrimonio Mundial, que agrupa en su seno a todas las ciudades del mundo con patrimonio excepcional universal reconocida por UNESCO, ha consolidado de la mano con los diferentes actores que cuidan el Centro Histórico de la Ciudad de México, una serie de acciones a lo largo de su vida, que han repercutido de forma estratégica en la vida de los habitantes del Centro histórico, algunas.

Se puede apreciar los trabajos de rehabilitación en diversos inmuebles que sufrieron daños con el terremoto de septiembre del 2017, con recursos del extinto FONDEN y con recursos del Programa Nacional de Reconstrucción, el PNR, se llevaron a cabo obras de restauración en los inmuebles denominados: Casa Talavera, Casa Conde de Regla, Capilla de la Expiración, Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, la Parroquia de San Pablo Apóstol “El Nuevo”, el Templo de San Juan de Dios, Templo de la Santísima Trinidad, Templo de Santa Catarina.

Actualmente, estamos interviniendo los templos de Loreto, La Profesa, Santa Cruz y Soledad, Santo Domingo, San Sebastián, San Lorenzo, así como el Antiguo Colegio de Cristo y etapas sucesivas de construcción en algunos de los inmuebles antes mencionados.

Por otra parte, con recurso local y con recurso del Programa de Ciudades Mexicanas Patrimonio Mundial, así como el recurso del Fideicomiso F/54 de SEDUVI, el Fideicomiso Centro Histórico ha hecho la intervención de más de 150 fachadas, mejorando de manera sustancial la imagen urbana del Centro.

Con recurso del Fideicomiso F/54 también se sustituyeron 127 puestos de periódicos del Perímetro A del Centro Histórico, se rehabilitó un edificio del Centro Cultural actualmente en República de Perú número 88, se rehabilitó el Antiguo Portal de Escribanos que se encuentra en el Callejón Leandro Valle, se restauraron 27 bancas artísticas que tienen sus enclaves en distintos puntos del Centro Histórico, se recuperó el espacio público del Jardín Regina y su cancha de futbol.

Actualmente, nos encontramos con recursos de esa misma procedencia instalando el elevador del Teatro Esperanza Iris, recuperando la fachada de la Casa Xochiquetzal en el Jardín Torres Quintero en Tepito, recuperando también el Callejón de Ecuador en el lindero de los barrios de La Lagunilla y Tepito en el Eje 1 Norte e interviniendo el callejón Leandro Valle en su área de La Fontana y de la portada que formó parte del Conjunto del Convento de la Orden Dominica, se han colocado alrededor de 800 elementos de señalética y nomenclatura de las calles en diversas zonas de este lugar.

En fin, y todavía faltan las joyas de la corona, como Kilómetro Cero, como la Casa Manzanares, estamos muy orgullosos en el Fideicomiso del Centro Histórico por todo lo que hemos podido hacer, nunca solos, siempre de la mano de otros entes del gobierno y gracias a la voluntad política del gobierno de esta ciudad, que es la ciudad de todos.

COORDINADORA DE PROMOCIÓN Y DIFUSIÓN DEL FIDEICOMISO CENTRO HISTÓRICO DE LA CIUDAD DE MÉXICO, ANABELÍ CONTRERAS JULIÁN (ACJ): Buenas tardes, buenas tardes a todas y todos.

En el Centro Histórico de la Ciudad de México hay edificios, calles y plazas que dan cuenta de la historia de la ciudad y de nuestro país, México. Se dice que en la esquina que forma República de Argentina y República de Guatemala, atrás de la Catedral, los mexicas fundaron la Ciudad de México, hace alrededor de 700 años, y que desde ahí mismo, Alonso García Bravo, por órdenes de Hernán Cortés, trazó la ciudad novohispana, el corazón de la Nueva España.

En esta zona se fundó lo que hoy es la Universidad Nacional Autónoma de México, se instalaron la primera Casa de Moneda, la primera imprenta y el primer museo del continente americano, y cuenta con vestigios de templos mexicas, posee la catedral más grande del continente y hermosos edificios públicos de los siglos XIX y XX.

En abril de 1980 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Decreto por el que se declara la Zona de Monumentos Históricos denominada Centro Histórico de la Ciudad de México, mediante el cual se crea un polígono de protección y conservación dividido en dos perímetros. Aquí, cabe aclarar, que las fronteras de estos perímetros obedecen a razones históricas y no a otro tipo de criterios para el establecimiento de esos límites.

El perímetro A, encierra la zona que cubrió la ciudad prehispánica y su ampliación virreinal hasta la Guerra de Independencia; el B, comprende la expansión de la ciudad hasta finales del siglo XIX, en suma, se trata de un polígono de poco más de 10 kilómetros cuadrados.

En 1983 el Estado mexicano se adhirió a la Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial, Cultural y Natural de la UNESCO, en esta se establece para los estados partes la obligación de identificar, proteger, conservar, rehabilitar y transmitir a las generaciones futuras el patrimonio cultural; acciones que no solo se refieren a la intervención y restauración de monumentos históricos, sino también a acciones que atienden aspectos sociales, económicos, ambientales y culturales, es decir, las dimensiones humana y social son factores fundamentales, puesto que el patrimonio es la memoria histórica de una sociedad.

En 1984 comenzaron los trabajos del expediente técnico para la postulación del Centro Histórico de la Ciudad de México a la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, lo cual sucedió el 11 de diciembre de 1987, compartiendo esta distinción con la zona chinampera de Xochimilco.

La declaratoria se metió como un reconocimiento del valor universal excepcional que hace del Centro Histórico de la Ciudad de México un sitio único o excepcional por sus valores arqueológicos, históricos, estéticos y patrimoniales.

De los 10 criterios establecidos por UNESCO de incluir un sitio en la lista del Patrimonio Mundial, el Centro Histórico de la Ciudad de México cumple con el criterio dos, que se refiere a su traza reticular; con el criterio tres, que se refiere a su pasado prehispánico, el cual representa un testimonio único sobre una tradición, cultura o una civilización desaparecida; y el cuatro, referido a su arquitectura y con esto, esto le da su valor universal excepcional.

Dicen por ahí que las ciudades son libros que se leen con los pies, el caso del Centro Histórico no puede ser más cierto, al recorrerlo podemos viajar por el tiempo y ver los vestigios de lo que fue la magnífica ciudad prehispánica, admirar el Zócalo, que es una de las plazas más grandes del mundo, contemplar edificios con estilos arquitectónicos de diferentes épocas y numerosas plazas y jardines.

La riqueza cultural de México parece en ocasiones conjugarse en las calles del Centro Histórico de la Ciudad de México, cuando escuchamos hablantes de lenguas indígenas, que se hablan 58 en toda la ciudad, mezclarse con hablantes del mundo, de todo el mundo. Los visitantes que acuden al Centro Histórico se cuentan por millones.

Los habitantes del Centro Histórico (inaudible) han mezclado sus actividades comerciales, sus lazos de amistad y sus bagajes culturales con ciudadanos de todo el mundo desde siempre, y vemos albergar en sus calles y recintos a libaneses, coreanos, salvadoreños, europeos en general y múltiples nacionalidades más que han dejado también su marca cultural entre nosotros.

La riqueza cultural del Centro Histórico se vuelve pues desgarradamente compleja, de ahí que la cuestión de un sitio como este tenga repercusiones a todos los niveles políticos, sociales y económicos, de ahí la importancia del documento que hoy se presenta.

Muchas gracias.

DIRECTOR DEL PROGRAMA UNIVERSITARIO DE ESTUDIOS SOBRE LA CIUDAD DE LA UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MÉXICO (UNAM), JAVIER DELGADO CAMPOS (JDC): Muy buenos días todas y todos ustedes. Maestro Martí Batres Guadarrama, Jefe de Gobierno, muchas gracias por la invitación. Distinguidos integrantes del presídium que nos acompañan, igualmente les agradezco la invitación para estar aquí con ustedes. A los distintos servidores públicos, amigos, colaboradores, vecinos de este increíble espacio público que es el Centro Histórico de la Ciudad de México.

La colaboración entre la academia y el sector público no solamente es una actividad necesaria, sino que, en este caso, entre el Programa Universitario de Estudios sobre la Ciudad y las autoridades del Centro Histórico ha sido muy fructífera; y se agradece porque esto se ha traducido en un documento que expresa en gran medida la calidad y pertinencia de las actividades que se han venido desarrollando antes de la gestión actual y que se han potenciado de una manera muy notable en la gestión actual de gobierno.

Y quiero subrayar en particular, dentro de estas novedades del nuevo Programa Integral de Manejo del Centro Histórico, la planeación participativa, esto que es una de las actividades, vamos a decir, más apreciadas del programa que me honro dirigir, ya que ello nos permitió tener un trabajo muy estrecho con los vecinos, con la gente que trabaja en el Centro Histórico, con la gente que viene de visita, que viene a comprar.

Lo hicimos a través de nueve talleres de planeación participativa, tres talleres de diagnóstico. No solamente se trata de escuchar las opiniones sino, además, llevarlo a una interpretación que nos permitió plasmar en mayor medida las sugerencias que hemos hecho para nuestras autoridades.

Y no solamente preservar, sino mejorar este espacio que, como repito, es uno de los espacios más valorados no solo en nuestro país, en América Latina, en muchos lados del mundo, no les estoy diciendo nada nuevo, pero nuestro Centro Histórico es algo de lo que nos enorgullecemos y por eso la participación del PUEC en este proyecto lo tengo que agradecer plenamente.

Pero también tuvimos conversatorios con distintos servidores públicos pertenecientes al Gobierno de Ciudad, que nos dieron también otra perspectiva de los mismos problemas, pero desde el lado de la responsabilidad pública para atenderlos. Tuvimos también seis reuniones con oficinas y dependencias específicas para atender los problemas más urgentes.

Y para ello contamos, como dije hace un momento, con la atención particular de la Jefatura de Gobierno, que nuevamente, maestro Batres, lo agradecemos; de la atención siempre oportuna y generosa del maestro Manuel Oropeza, Autoridad del Centro Histórico, que también nos facilitó toda la información y las facilidades para que el PUEC pudiera realizar su trabajo en esta área tan compleja como es el Centro Histórico, y a partir de ahí los servidores públicos, el funcionariado que depende de ustedes, igualmente nos atendió.

Y esto fue importante porque la actualización del programa no solamente es una acción necesaria, sino que, además, es imprescindible. No les digo nada nuevo si repito que este espacio particular de la ciudad es un espacio más dinámico de toda ciudad, incluso podría yo asegurar que es uno de los más dinámicos de toda la ciudad y de muchas ciudades de nuestro país.

En particular, algo que es muy honroso para nosotros, es que el ejercicio de actualización no solamente fue un ejercicio de planeación urbanístico, sino que, además, nos puso en la posibilidad de actualizar este documento con los nuevos ordenamientos y lineamientos de la Constitución de la Ciudad de México, como ustedes saben, es una de las ciudades pioneras en nuestro país en esta dimensión.

Pero, además, porque muchas de las acciones que en el documento se mencionan, apuntan hacia una refuncionalización del Centro Histórico, tampoco es una sorpresa, perdón que esté diciendo tantas que no es una sorpresa, pero, la verdad, es tan dinámico este espacio, dinámico y complejo, porque no podemos tirar edificios, pasar nuevas avenidas, todas las modificaciones tenemos que hacerlas en el espacio que está ahí y eso implica un reto mayor.

Y en esta ocasión fue también muy afortunada la intervención o más bien la mayor atención al Polígono B, que también demanda una atención cada vez más importante. Ustedes saben muy bien que ese polígono está sujeto a una dinámica, por supuesto, influenciado, derivado, articulado con el Polígono A, que es el núcleo de la zona declarada.

Y también hay que reconocer que, desde que se entregó el programa, ha habido novedades en este espacio, como digo muy dinámico, que la autoridad del Centro Histórico ha tendido prontamente, como es la ampliación de red de vecinos interesados en la preservación del patrimonio, incluyendo a este perímetro B, al que me he referido, pero también al mejoramiento de espacios públicos en este mismo perímetro B.

Bueno, por todas estas razones nuevamente me complace transmitir mis agradecimientos del Programa Universitario Estudios sobre la Ciudad, de la propia Universidad Nacional Autónoma de México, por la oportunidad de plasmar en este documento el conocimiento, las investigaciones que numerosos investigadores de la propia universidad han puesto con todo cariño y con todo compromiso para que tengamos un documento que esperamos, estamos seguros, servirá a la Jefatura de Gobierno, a la Autoridad del Centro Histórico para llevar mejor a cabo su trabajo.

Déjenme decirles, por último, ya termino, que actualmente estamos trabajando con un instrumento de seguimiento, de evaluación y seguimiento de estas acciones, que ha sido un requerimiento prácticamente desde la gestión de la maestra Dunia Ludlow, pero que actualmente se le ha puesto mucha atención.

Bueno, por todo lo anterior les agradezco su paciencia para conmigo y paso a retirarme.