Tarjeta Informativa. 3 de noviembre 2023

Publicado el 03 Noviembre 2023

Derivado de las distintas notas periodísticas, así como comentarios en redes sociales que retoman datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) y que insinúan un mal registro de homicidios dolosos en la capital del país, el Gobierno de la Ciudad de México aclara que, de ninguna manera, la administración ni la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina esconden homicidios dolosos.

Mensualmente la FGJ reporta al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública todas las carpetas de investigación por homicidio doloso y culposo donde la autoridad ministerial mediante sus facultades de investigación determinó la existencia o presunción del delito de homicidio, mismas que son públicas y están disponibles para su descarga.

La controversia creada por distintos medios de comunicación y en redes sociales se da porque, de acuerdo con los datos del INEGI, hubo 1,549 muertes violentas que fueron clasificadas como eventos de intención no determinada. Estas muertes representan 37% de las muertes violentas en 2022.

En redes sociales algunas personas han insinuado que las defunciones violentas clasificadas como eventos de intención no determinada podrían corresponder a homicidios dolosos.

Es importante aclarar que los datos publicados por el INEGI provienen directamente de los certificados de defunción que son reportados a la Secretaría de Salud local. En los certificados de defunción, el médico que certifica el fallecimiento es responsable de incluir causa y determinar de manera preliminar si existió intención o no en la muerte.

En aproximadamente el 37% de los casos de defunciones por causas externas registrados en 2022, los médicos certificantes las clasificaron como muertes de intención no determinada ya que no contaban con suficiente información en el momento de certificación de la muerte para decidir si hubo o no dolo.

En el cruce de datos públicos de 2022 entre el INEGI y la FGJ, las cifras de muertes por causa externa coinciden, mientras que las muertes sin intención fueron clasificadas adecuadamente por la Fiscalía capitalina. Para muertes con causas externas cabe señalar que el INEGI cataloga la información a través de tres rubros: accidentales (1,552), suicidios (260) y sin intencionalidad determinada (1,549); mientras que la Fiscalía en suicidios (569), homicidio culposo (754) y pérdida de vida por causas externas sin comisión de delito (2,261). Esto implica que en la base reportada por INEGI las muertes por causa externa que no fueron homicidio doloso suman 3,361 en 2022, mientras que en la base reportada por la FGJ suman 3,584. Es decir, no hay una diferencia sustantiva entre ambas, de hecho más del 94% de los casos reportados por INEGI como de intención no determinada en 2022 no fueron homicidios dolosos. Esto significa que no cambia la tendencia histórica a la baja que se ha reportado con datos de la FGJ desde 2019.

Con esto, queda claro que no hay una clasificación errónea ni intencional para reducir la cifra de homicidios dolosos en la Ciudad de México de manera artificial. Vale la pena señalar que los datos citados en el párrafo anterior obran en fuentes públicas y pudieron, por tanto, ser consultados por quienes han declarado que dicho error o intención existen.

Es crucial notar que en su inmensa mayoría las muertes sin intencionalidad determinada representan casos de accidentes y suicidios donde el médico certificante no determina una intencionalidad y por lo tanto es la autoridad ministerial quien determina posteriormente la existencia o no de dolo.

Por ilustrar un caso hipotético; el médico certificante determina que la causa de muerte fue una caída desde una altura, pero no cuenta en el momento de la necropsia con elementos para determinar si la persona se cayó accidentalmente, se lanzó por su propia voluntad, fue empujada accidentalmente o fue empujada con dolo por un tercero. Esto no evita que posteriormente la autoridad ministerial determine, dada una investigación, la apertura de una carpeta de investigación por el delito de homicidio.

Si bien el porcentaje de muertes violentas clasificadas como de intención no determinada es más alto en la Ciudad de México que en el resto del país, este no es un fenómeno nuevo. Desde el año 2015 cerca del 30% de las muertes violentas son clasificadas en esta categoría y está relacionado con el llenado de los certificados de defunción por parte de los médicos legistas quienes, a diferencia de otras entidades del país, en un primer momento no incluyen información, en muchos de los casos, sobre la intencionalidad o no de una defunción, en espera de que la autoridad ministerial determine si existen elementos para la apertura de una carpeta de investigación por un delito.

Si bien existen elementos para considerar que prácticamente la totalidad de las muertes registradas como eventos de intención no determinada NO corresponden a homicidios dolosos, para poder dar más información se analizará a detalle cada uno de los 1,500 casos en esta condición. Este, es un ejercicio que iniciará inmediatamente con la creación de una mesa interinstitucional en el Gobierno de la Ciudad de México, con el objetivo de brindar mayor información en los próximos días.