Mensaje de la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo; y del Director Ejecutivo de Operación del Instituto de Vivienda (INVI), Raúl Bautista González, durante la entrega de la Unidad Habitacional "Manuel Salazar", en Alcaldía Azcapotzalco

JEFA DE GOBIERNO, CLAUDIA SHEINBAUM PARDO (CSP): Muy buenas tardes, me da mucho gusto estar con ustedes; muchas gracias a nuestra alcaldesa Margarita Saldaña, por estar aquí con nosotros, por recibirnos siempre aquí en Azcapotzalco, muchas gracias, Margarita.

Y, me da mucho gusto estar el día de hoy que se les entrega su vivienda, son 105 departamentos −si mal no me equivoco−, a ver levanten la mano los que reciben hoy su vivienda, pues de eso se trata ser gobierno.

Nosotros estamos convencidos que el gobierno tiene que servir para permitir el acceso a los grandes derechos. Durante muchos años se mercantilizó absolutamente todo: la educación, la salud, la vivienda; y está bien −por supuesto− que haya actividades privadas, estamos de acuerdo con ello, pero hay derechos que tiene necesariamente que abrir el gobierno.

La educación pública, por ejemplo, no podría existir si no estuviera el Estado y si el gobierno no lo apoyara; imagínense ustedes que la educación tuviera un costo para todos los ciudadanos. Hace 100 años Vasconcelos creó la Secretaría de Educación Pública y hoy la educación es un derecho, pero nosotros impulsamos la educación como derecho; damos becas a los niños y las niñas, de preescolar, primaria y secundaria de escuela pública. Abrimos más preparatorias, que creó en su momento el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Y también apoyamos la salud con tres Hospitales Generales que hemos construido, y ahora vamos a pasar todo el Sistema de Salud al IMSS-Bienestar, para que se fortalezca el Sistema de Salud de la Ciudad de México.

Y, también la vivienda es un derecho. La vivienda en la Ciudad de México se ha encarecido mucho y si no existiera la producción social de la vivienda, no habría la posibilidad de tener acceso a una vivienda digna.

Durante el gobierno que hemos encabezado hemos dedicado a tres programas principalmente: el primero es a la Reconstrucción Viviendas, después del sismo de 2017 fueron 25 mil familias que se quedaron sin vivienda y nosotros nos comprometimos a que sin ningún costo iban a recuperar su vivienda; llevamos ya el 80 por ciento de la vivienda reconstruida y estamos por cumplir el 20 por ciento más, esto ha requerido de una inversión impresionante para poder darle la vivienda a cada una de las personas que las perdió.

El segundo, es el apoyo para el Mejoramiento de Vivienda, es decir, aquellas personas que tienen ya un lote de vivienda y que requieren recursos sea para construir nueva vivienda o recursos para mejorar su vivienda, sea para construir un cuarto, sea para construir una pequeña casa, si su familia vive con ellos, sea para mejorar las condiciones de la vivienda.

Y la otra es esta vivienda, la vivienda nueva. Que hay distintas formas de producción de la vivienda; y en esta vivienda nueva, mucho tiene que ver la lucha de cada uno de ustedes, la lucha de organizaciones sociales que durante mucho tiempo de manera honesta han generado la producción de la vivienda social.

Durante muchos años −también en el último tiempo de la anterior administración−, también se pervirtió y se corrompió mucho la producción de la vivienda y el propio Instituto de Vivienda. Había que pagar viviendas para poder tener una vivienda a los responsables del INVI, había que dar moches para poder tener vivienda o había que generar distintas condiciones de corrupción. Y nosotros llegamos y limpiamos todo eso, lo limpiamos para que sea el Instituto de Vivienda, que de manera directa, pueda otorgar la vivienda sin necesidad de ningún moche, de ninguna corrupción de por medio y la verdad en eso, Anselmo, Rodrigo, Raúl han hecho un gran trabajo al frente del Instituto de Vivienda, tratando de limpiar todo aquello que había estado dañado y recuperando realmente lo que debe ser el gobierno, los servidores públicos, porque ser servidor público es estar al servicio del pueblo, no es estar al servicio de uno mismo.

Y esa es la mística con la cual gobernamos, la mística que abre derechos y la mística que destina los recursos públicos para beneficio del pueblo. Tenemos un buen maestro que es el Presidente Andrés Manuel López Obrador y de ahí hemos aprendido que el recurso público no es para beneficio de unos cuantos, sino que el recurso público es para beneficio de los que menos tienen y para beneficio de los habitantes de la ciudad. Así, con ese criterio, con esa ética, con esa mística hemos gobernado, acabando con los privilegios, acabando con la corrupción y destinando los recursos públicos para lo que se necesita.

Así que el día de hoy −como bien ha comentado nuestra compañera− no solamente se entrega una vivienda, sino se entrega un sueño y se entrega la posibilidad de tener una vida más digna, y con eso, imagínense, como gobernante no hay nada más maravilloso que poder hacer feliz a una familia, así que muchísimas gracias por su compromiso.

Y de igual manera también decirles, fíjense, la Ciudad de México es una de las ciudades que tiene la población más solidaria del mundo, aquí hay un sismo −toquemos madera− y todos nos damos la mano, nos apoyamos, nos buscamos; aquí vivimos una pandemia y nos apoyamos también mucho entre vecinos, entre amigos, entre familias.

Y ahora que ustedes han luchado tanto por esta vivienda, ahora que ya se les entrega, yo lo único que les pido es que sigan manteniendo ese espíritu de solidaridad en la vida cotidiana. Yo también vivo en un edificio y a veces con los vecinos en vez de tener esa solidaridad nos quejamos todos los días: que si porque dejaron la basura, que si porque están haciendo ruido, que si porque taconea el vecino.

Y si mantenemos ese espíritu que tuvimos para la construcción de la vivienda y ese espíritu que caracteriza a los habitantes de la ciudad, de la misma manera van a tener una vivienda que siga manteniendo estas condiciones de solidaridad y de fraternidad, que al final es lo que buscamos todos, para nuestro pueblo.

Así que, muchísimas gracias a todos y muchísimas, muchísimas, muchísimas felicidades por esta vivienda nueva.

Muchas gracias, a todos y a todas.

DIRECTOR EJECUTIVO DE OPERACIÓN DEL INSTITUTO DE VIVIENDA (INVI), RAÚL BAUTISTA GONZÁLEZ (RBG): Gracias, buenas tardes a todos ustedes beneficiarios de este proyecto habitacional de “Manuel Salazar”.

Es la verdad un gusto estar en este acto, porque no es sino la culminación de muchos años de lucha, de esfuerzo, de sacrificio, de descuidar un poco a la familia, al marido, de estar pendientes de cómo avanza la gestión, en qué se atora, qué hay que presionar para que las gentes responsables de atender estas necesidades actúen, y actúen rápido y actúen bien.

Ustedes han probado en el desarrollo en estos años, las formas de producción de vivienda; hay una producción privada, una producción de viviendas que están pensadas con fines de lucro, de negocio, no para resolver las necesidades de la gente que no tiene vivienda, sino para incrementar las cuentas bancarias de los empresarios en el ramo de la construcción e inmobiliarios.

Y esta producción de vivienda privada no está pensada en la gente que necesita la vivienda, sino en la gente que la puede pagar, por eso hay un montón de edificios ahí hechos y vacíos, porque la gente que no tiene vivienda, pero tampoco puede pagar lo que cuestan esas viviendas, está prácticamente excluida.

Y, esa producción privada de vivienda no es que sea mala, ellos hacen su inversión y van por sus ganancias, pero en contraparte a esa producción privada hay una producción social y es la que el Gobierno de la Ciudad de México está impulsando, reconociendo la vivienda como un derecho, no como una mercancía y todos los habitantes de esta ciudad estén casados, tengamos familia o no, todos tenemos derecho a una vivienda adecuada. Y, vivienda adecuada, quiere decir un lugar dónde vivir con dignidad, con seguridad, tanto física como en la tenencia, y en donde podamos disfrutar de un espacio para la privacidad.

Y esta producción social de vivienda lleva, inclusive, a que podamos comparar precios, salimos a preguntar a los alrededores cuánto cuesta un departamento de la producción privada −de las empresas privadas− y nos lo vamos a encontrar entre un millón 700 y dos millones; y entre más pegados a Aldana, a la Granada, a Polanco, se van haciendo mucho más caros, comparado con los precios, con el apoyo, con la solidaridad, que el Instituto de Vivienda y particularmente la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, está dando, el compromiso, la atención, la sensibilidad y la prioridad que la vivienda significa para la Ciudad de México.

Por eso, estos son logros que hay que cacarear, que hay que presumirlos, porque estamos haciendo vivienda a la mitad del precio comercial de las empresas privadas, en la misma extensión de 57, 60 metros cuadrados, pero con costos muchos menores, con créditos que no tienen intereses, con la confianza a la palabra, porque la consideración es que todos tengamos condiciones de bienestar para el desarrollo de la familia, para el desarrollo de cada uno de nosotros. Y, cuando uno se engancha en un crédito privado, vende su alma y su futuro y al final de cuentas, termina siendo imposible de poder pagar.

Por eso felicidades, disfrutar esta vivienda. Y una cosa que creo que es bien importante, porque es una experiencia de vida, disfruten a sus vecinos, convivan con ellos, llevémonos la fiesta como buenos vecinos, para que todos podamos disfrutar un bienestar en las mejores condiciones de fiesta, de relaciones, de tener una buena convivencia en este tipo de organizaciones.

Muchas gracias.

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