Mensaje de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina; y de la secretaria de Bienestar e Igualdad Social, Araceli Damián González, durante conferencia de prensa. Lanzamiento del Sistema Público de Cuidados
JEFA DE GOBIERNO, CLARA BRUGADA MOLINA (CBM): Gracias. Buen día a todas y todos los medios de comunicación presentes.
Efectivamente, hoy es el Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo, y quisimos aprovechar este día para dar a conocer a ustedes uno de los temas que hemos estado proponiendo, sacando al debate público y sobre todo, trabajando para construir el Sistema Público de Cuidados para la Ciudad de México.
Así que, después de que la Asamblea General de las Naciones Unidas define el día de hoy ya como el Día Internacional, aquí varias compañeras intervinieron para lograr que ya tuviéramos un día en donde habláramos y se reflexionara sobre este tema, quiero informarles que en esta Ciudad de México echaremos a andar este gran Sistema Público de Cuidados que tiene varios objetivos:
El primero es visibilizar una problemática que nuestra secretaria de Bienestar el día de hoy ha expuesto –y aprovecho para saludar a todas las secretarias y compañeros en esta conferencia–, y se trata de hablar de todas estas tareas que se llevan a cabo, principalmente por las mujeres, a partir de un rol desigual que la sociedad ha asignado y que hoy por hoy constituye una de las barreras más importantes para acabar con las brechas de desigualdad que tenemos en la sociedad entre hombres y mujeres.
¿Por qué? Porque hay un conjunto de trabajos, de esfuerzo, de tareas que se realizan todos los días, como es alimentar a la familia, cuidar a las personas, cocinar, limpiar, etcétera, que no son consideradas trabajo, que no son remuneradas, que no son parte de lo que consideramos es un trabajo; generalmente la tarea de los cuidados como no se paga, no es considerado un trabajo.
Entonces, queremos romper con este tipo de estereotipos y el gran objetivo es que construyamos una ciudad cuidadora, una ciudad que cuide a las que históricamente nos han cuidado, una ciudad que ponga énfasis en combatir desigualdades entre hombres y mujeres y, sobre todo, que derribe los obstáculos y las barreras que impiden que mujeres puedan jugar los mismos roles en su vida que pueden jugar los hombres.
Es decir, una mujer generalmente trunca sus estudios para cuidar a la familia, una mujer se sale de obtener ingreso para cuidar a la familia, una mujer no genera ingresos por dedicarse a garantizar que la familia esté bien y que haya cuidados que se requieren en la familia; es decir, hay una distribución inequitativa que ya no es sostenible y que no podemos hablar de transformación si seguimos relegando estas tareas exclusivamente a las mujeres.
Entonces yo pongo aquí este tema como uno de los grandes problemas que tenemos, no solo en la Ciudad de México, en el país y en el mundo entero. Y lo pongo hoy de manera pública para hablar de lo que hoy tiene la Constitución de la Ciudad de México como una obligación de los gobiernos para atender el tema de los cuidados.
El Artículo 9 de nuestra Constitución dice que: “Toda persona tiene derecho al cuidado que sustente su vida y le otorgue los elementos materiales y simbólicos para vivir en sociedad a lo largo de toda su vida”, dice también, “las autoridades establecerán un sistema de cuidados que preste servicios públicos universales, accesibles, pertinentes, suficientes y de calidad y desarrolle políticas públicas al respecto”, y eso es lo que vamos a hacer en la Ciudad de México.
Entonces lo que digo no tiene que ver solo con una propuesta, que como gobierno vamos a implementar, sino que parte de un derecho fundamental logrado en la Constitución de la Ciudad de México.
Y también aprovechamos para reflexionar sobre lo que llamamos “las tres R” en el Sistema Público de Cuidados. La primera “R” es revalorar la tarea de los cuidados que existen en la sociedad como una actividad clave para el bienestar, el funcionamiento de la vida, incluida la economía; es decir, como los cuidados no se pagan, pareciera que no tienen valor, entonces hay que revalorar.
Simplemente hagamos un ejercicio, ¿qué pasaría si no hubiera una mujer en la familia que hiciera todas estas tareas? Quién cuidaría a los niños o cuánto nos costaría que se cuidara a los niños, cuánto costaría hacer de comer, cuánto costaría quien limpiara la casa, cuánto costaría quien lavara la ropa, etcétera, etcétera, es decir, es un trabajo que no es valorado económicamente y que hoy tenemos que revalorarlo.
La segunda “R” es la reducción, es la disminución del tiempo y esfuerzo que especialmente dedican las mujeres o las personas cuidadoras a estas tareas. Ese es el otro objetivo del Sistema Público de Cuidados: la reducción del tiempo en estas tareas.
Y la tercera “R” es la redistribución de la tarea de los cuidados al interior de los hogares en la familia, pero también la redistribución entre el Estado, las empresas y la propia comunidad.
Así que con esos objetivos, que sencillamente le llamamos “las tres R”, también hemos definido, bajo una perspectiva de género, principios que queremos lograr en el Sistema Público de Cuidados. Y uno es desfeminizar las tareas del cuidado, que implica romper con los estereotipos de género donde se elimine la idea de que son las mujeres las que deben de cargar con la tarea de los cuidados, o sea, esto es lo principal, desfeminizar la tarea de los cuidados.
Segundo, socializar el trabajo de los cuidados y eso implica la participación de los gobiernos para lograr que en esta sociedad y, en este caso, en esta ciudad, se repiense el espacio público bajo una perspectiva de cuidados, se repiense la ciudad bajo una perspectiva de cuidados y no solo se deje esta tarea a las mujeres; es decir, lo que antes era privado, que era lavar, planchar y cuidar a los demás, hoy tiene que replantearse como una tarea fundamental de la ciudad y del Estado.
Por eso pensamos que necesitamos una ley de cuidados a nivel nacional y a nivel de esta ciudad, y para ello estamos trabajando en una propuesta legislativa que nos permita garantizar que este derecho que tenemos ya en la Constitución se traduzca en una propuesta que esté pensando qué atribuciones del Sistema Público de Cuidados le deberá de tocar a la ciudad y qué atribuciones le deberá tocar a las Alcaldías, así como también planes que nos permiten establecer el Sistema Público de Cuidados a corto, a mediano y largo plazo.
Es como la tarea del agua, tenemos que planear a futuro, como lo hemos mencionado, también en el Sistema Público de Cuidados; así como un sistema de protección social para las niñas, niños, mujeres, personas con discapacidad, adultos mayores, que ya se tiene muchos avances en ello en esta ciudad.
Esta ley también debe de contemplar la implementación de una especializada y robusta red de infraestructuras y servicios de cuidado, tanto en apoyos a la población directa, como transformaciones del espacio público.
Uno es atención a las infancias. Por eso desde el Gobierno de la Ciudad llevaremos a cabo el programa “Desde la Cuna” que dará una transferencia económica a las madres, padres o tutores de niñas y niños de 0 a 3 años; y el programa, por supuesto, consiste en promover y garantizar seguimiento de alimentación nutritiva y saludable y de prevención de enfermedades.
El otro aspecto tiene que ver con la ampliación de los Centros de Cuidado y Desarrollo Infantil, aquí ya escuchamos el diagnóstico, que hacen falta muchos espacios de cuidado infantil en esta ciudad. Así que vamos a crear, tan solo en estos seis años, 200 espacios de Centros de Cuidado y Desarrollo Infantil –que antes llamábamos guarderías– y que van a ser públicos, operados por el Gobierno de la Ciudad, construidos por el Gobierno de la Ciudad; 100 de estos centros van a estar en las UTOPÍAS que vamos a construir, y las otras 100 van a estar tanto en PILARES como en otros espacios que tiene la ciudad.
También crearemos cooperativas de personas cuidadoras que le llamaremos “Cuneros Comunitarios”, los “CUCOS”, que serán organizados por personas cuidadoras en la comunidad, que brindarán atención y cuidado a las niñas y niños.
Así que este proyecto, que son cooperativas de cuidados, Cuneros Comunitarios, también desde la Secretaría del Trabajo lo llevaremos a cabo para apoyar lo que en la realidad hace mucha gente: junta sus niños en las comunidades y que se los cuide la vecina o las familias completas, entonces vamos a apoyar en ese sentido.
También es importante decir que estamos porque se amplíe el número de escuelas de tiempo completo, esto no nos toca a la ciudad, le toca a la Autoridad Educativa Federal, pero es una de las gestiones que estamos llevando a cabo; así como programas masivos de actividades y de clases extraescolares.
Es decir, queremos que en las escuelas públicas, y ya lo vamos hacer como un acuerdo con la Autoridad Federal, que en los próximos días estaremos firmando el convenio, se llevarán a cabo principalmente los fines de semana, se abrirán las escuelas para que ahí podamos atender temas prioritarios de educación, desde las artes, cultura, deporte y ciencias, pero eso implica que en las escuelas de solo un turno podemos ampliarlo para las tardes, en las propias escuelas, y en las escuelas de doble turno estaremos utilizando los fines de semana para lograrlo.
También estaremos impulsando un conjunto de espacios educativos de manera integral, fortalecer las escuelas como uno de los pilares básicos, no solo de la educación, sino del Sistema Público de Cuidados.
Para las adolescencias estamos contemplando echar andar un programa amplio, integral, de atención a la salud mental de las y los adolescentes, y eso es parte del Sistema Público de Cuidados; asimismo, programa de prevención de embarazo adolescente y talleres de salud sexual y reproductiva.
También estaremos impulsando el derecho a la alimentación para la población en general con comedores públicos, que se continuarán ampliando a lo largo y ancho de la ciudad.
El tercer sector son las personas con discapacidad. Se llevarán a cabo centros de rehabilitación para personas con discapacidad, con servicios adecuados para las distintas discapacidades que existen. Así que este tema que generalmente era tratado poco, hoy vamos a tener mucha infraestructura, atención y desarrollo para personas con discapacidad.
Estrategias también de accesibilidad universal en el espacio público, en escuelas y transporte para las personas con discapacidad; y un nuevo modelo de atención de discapacidad física y motriz tanto en el DIF, como en otros espacios donde ya se está atendiendo. Es decir, que no vamos a dejar solos a las personas con discapacidad y este gobierno va a implementar un gran programa en su apoyo.
El inciso "D" es para las personas mayores. Que, como sabemos, el Gobierno Federal ya apoya con una pensión para las personas de 65 años en adelante, y aquí en la Ciudad de México llevaremos a cabo Casas de Día para la convivencia, el bienestar y el buen vivir de las personas mayores; y también seguimiento a estados de salud y emocional generando vínculos permanentes que necesitan los adultos mayores.
Así que vamos también a implementar residencias para los adultos mayores, que no tienen los adultos solos donde vivir, estaremos construyendo residencias para atenderlos.
Y en la población en general el Sistema Público de Cuidados tiene como componente fundamental las tareas de salud preventivas, así que a lo largo y ancho de la ciudad estaremos promoviendo un programa de salud a las familias casa por casa y tendremos espacios de casas de salud preventiva, donde tengan médico general, atención psicológica, dental, nutricional, ginecología, pediatría, geriatría, así como servicios de mastografía y laboratorios clínicos.
También vamos a construir unidades de servicio para la vida cotidiana, a eso nos referimos cuando decimos socializar estas tareas, por lo tanto, en los espacios públicos serán construidos lavanderías, comedores comunitarios, espacios de apoyo para las tareas de las infancias, ludotecas, así como servicios de relajación que brindarán atención y cuidados a quienes cuidan.
También estaremos brindando un apoyo económico a mujeres y personas cuidadoras que dan acompañamiento a personas postradas, personas mayores o con algún grado de dependencia y personas con discapacidad. Como sabemos, todas las mujeres cuidan, pero destinaremos apoyo para aquellas personas que se dedican a cuidar a una persona totalmente dependiente y que requiere apoyo.
Y, por último, otro eje importante del Sistema Público de Cuidados es la escuela de las nuevas masculinidades, que implica talleres y toma de conciencia de lo que implican las tareas de los cuidados y los roles en la familia.
Así que nuestra meta es construir una ciudad cuidadora, porque el cuidado es imprescindible para el mantenimiento de la vida y queremos que todas las personas que cuidan, en esta ciudad tengan acceso al Sistema Público de Cuidados, que es una deuda histórica principalmente a las mujeres.
Construiremos una ciudad que coloca la sostenibilidad de la vida al centro y para ello este es uno de los programas prioritarios y fundamentales que echaremos a andar desde la Ciudad de México. Eso implica que al interior de nuestro gobierno estaremos organizándonos en una coordinación del Sistema Público de Cuidados que, como todos ustedes saben, incluye a varias Secretarías y tratar de hacer esfuerzos comunes para lograr estos objetivos.
Bueno, pues de eso se trató el día de hoy, de dar a conocer en qué consistirá el Sistema Público de Cuidados, que muy pronto echaremos a andar.
Muchas gracias.
SECRETARIA DE BIENESTAR E IGUALDAD SOCIAL, ARACELI DAMIÁN GONZÁLEZ (ADG): Muy buenos días a todos, a todas, a todes.
Hoy es el Día Internacional de los Cuidados y el Apoyo que fue declarado por Naciones Unidas en 2023; y esta es nuestra primera gran conferencia que tenemos con relación al tema de cuidados, que es una de las actividades más relevantes para la sociedad y nos sentimos muy orgullosos de estar en este momento presentando un diagnóstico, y la jefa de Gobierno presentará el Sistema de Cuidados propuesto para la Ciudad de México.
Vamos a hablar de distintos ejes: el diagnóstico, cómo se va a componer, una serie de cuestiones –me voy a saltar el índice, si podemos seguir con el diagnóstico, por favor–. Quiero, en primer lugar, hablar de la importancia económica que tiene el trabajo no remunerado, que tiene que ver con el trabajo que se hace en casa, tanto doméstico como de cuidados.
De hecho, el trabajo no remunerado doméstico -ya también- actualmente se cataloga como parte del cuidado que es un cuidado indirecto, entonces es realmente todo el conjunto de actividades para que la sociedad, las personas, los niños, los ancianos, puedan tener una vida sana y puedan realizar sus distintas actividades, porque es muy importante todo el tema de cuidados en materia de las responsabilidades que tenemos en la sociedad como trabajadores, madres, amigos, compañeros, en fin, una serie de cuestiones, el tema de cuidados es fundamental para realizar todas estas actividades.
Pero, además, es de tal relevancia, que en la Ciudad de México casi el 12 por ciento de este trabajo representa, en comparación con el Producto Interno Bruto local, que es bastante elevado, aunque sí es menor con relación a cómo es la contribución del trabajo no remunerado a nivel nacional.
Otro de los temas que nos parece importante y relevante destacar, es que hay una relación, o sea, los hogares intercambian tiempo de trabajo remunerado –digamos, que genera ingresos– por tiempo libre, pero también hay una parte que tiene que ver precisamente con este trabajo no remunerado que genera pobreza de tiempo.
Entonces tenemos que, por ejemplo, en 2018, casi dos terceras partes de la población en la Ciudad de México padecían pobreza de tiempo, esta baja por la pandemia dado que se reducen las oportunidades de empleo, y otra vez vuelve a subir en 2022, de ahí la importancia de contribuir a la reducción de la carga de trabajo doméstico que recae, sobre todo, en las mujeres.
Se ha identificado a la población que puede tener necesidades de cuidado en la ciudad y esta asciende a casi 3 millones de personas. Los que más necesitan es la población de 0 a 5 años, en términos del tiempo que se requiere y de la cantidad de esfuerzo que se requiere para que estas personas, los menores de 0 a 5, puedan tener una vida sana, cuidada, con amor y, además, con todo lo que necesitan, y están catalogados con una necesidad muy alta; así como con aquellas personas que no pueden hacer ninguna actividad, que en la ciudad son alrededor de 126 mil personas.
Y el resto es población que tiene, digamos, mayor o menor intensidad de necesidad de cuidado, las que menos tienen son aquellas personas de 15 años y más que tienen poca dificultad para realizar ciertas actividades, que asciende a casi un millón de personas.
Dentro de la Ciudad de México, un millón 248 mil mujeres brindaron cuidado frente a 660 mil hombres, según la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares; como pueden ver, es casi el doble de mujeres con relación a la cantidad de hombres que participan activamente.
Alrededor del 40 por ciento están en edades reproductivas y en edades productivas, de 18 a 40 años, es decir, la mayor carga se tiene en esa población, que cuida niños pequeños, que tiene que realizar trabajo doméstico; y otro 50 por ciento tiene más de 40 años.
El 10 por ciento adicional de las personas que cuidan, son menores de edad, es decir, que tienen entre 12 y 17 años. Eso quiere decir que hay una complementariedad y hay niñas y niños que están realizando esta actividad misma inclusive, hay un cuidado como transversal: los adultos mayores cuidan a niños y hay niños que cuidan a adultos mayores, entonces hay este tipo de diferenciación.
Este es el porcentaje de personas por sexo, según horas dedicadas al trabajo no remunerado. Y aquí tenemos que el 10 por ciento de las mujeres y 4 por ciento de los hombres que cuidan, lo hacen más de 50 horas a la semana.
Si vemos las gráficas, cuando hablamos del menor número de horas dedicadas al trabajo doméstico y al cuidado, se refiere sobre todo a hombres; mientras que cuando hablamos de más de 20 horas a la semana de dedicación al cuidado, se refiere básicamente a mujeres.
En promedio, las personas que cuidan, a la semana son alrededor de 40 horas, 39; y las mujeres dedican 51 horas en promedio en la semana frente a 22 de los hombres, cuando se trata de cuidado de niños de 0 a 6 años. Aquí estamos mostrando que, efectivamente, la población de menor edad es la que requiere más cuidado, estamos hablando de más de una jornada de trabajo requerida para cuidar a niños y niñas de 0 a 6 años.
Tenemos también esta cuestión de la población de acuerdo a los estratos de pobreza: mientras más pobres son las personas en materia de pobreza, más horas dedican al trabajo doméstico, entonces tenemos una combinación de carencias, tanto de ingreso como de necesidades básicas, y además una carga excesiva entre las poblaciones más pobres.
Y estos son mapas de cuidado –solamente quiero compartirlos– en términos de cómo están distribuidos los Centros de Atención y Cuidado Infantil de la Ciudad de México, tanto a cargo del Gobierno de la Ciudad, como de las Alcaldías.
Una primera cuestión que tenemos que resaltar es que la infraestructura que estamos heredando de los Centros de Atención y Cuidados están altamente concentrados, cuando se trata del Gobierno de la Ciudad; y las Alcaldías, si bien lo tienen distribuido, no alcanza a cubrir a las zonas de mayor demanda que están, sobre todo, en la periferia, donde está la parte azul más oscura.
Por tanto, esas zonas que están iluminadas de colores, tanto morado como naranja, significa que es ahí donde tenemos la mayor demanda de necesidades, de espacios, de cuidado infantil y, además, tenemos bastantes núcleos de pobreza, por lo que se tendrá que reforzar esas áreas de manera estratégica.
Lo mismo ocurre con la disponibilidad de servicios para el cuidado de adultos mayores, si bien estos están más dispersos, hay menos casas de cuidado con relación al número de lugares de cuidado infantil, pero también aquí identificamos áreas en las que podemos dar mayor prioridad.
Pero en el caso de los adultos mayores lo que es importante es que, además de las zonas periféricas que no cuentan con casas de cuidado, ni con zonas de atención para adultos mayores, se tendrá que hacer también una inversión de infraestructura en Alcaldías centrales, porque son las que tienen el mayor porcentaje de personas adultas mayores.
Entonces, vamos a tener una combinación en términos de priorización de las estrategias, no solamente en las periferias, en el caso de adultos mayores, sino que también nos tendremos que concentrar en Alcaldías centrales; lo mismo ocurriría con el tema de discapacidad. Y yo lo dejaría hasta ahí.
Muchas gracias.